TREINTA AÑOS DE VIDA MATRIMONIAL CONVERTIDOS EN MINUTOS DE FELICIDAD

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EMOTIVA CELEBRACIÓN DE LA FAMILIA ÁVILA NARVÁEZ

Por: Emiliano Martínez Regalado

Con gusto y algarabía la familia Ávila Narváez, celebro a sus padres los treinta años de vida matrimonial, de sus queridos padres.

Rodeados de sus primogénitos, familiares e invitados. el matrimonio Ávila Narváez, declaro en exclusiva para este medio de información que los treinta años de vida matrimonial han sido como tres minutos de felicidad sin dejar de sentir los menores y pormenores que la vida da, es por ello dijeron estamos juntos y rodeados de nuestros hijos y seres queridos.

Juan Ávila Velázquez y su distinguida esposa Rosario Narváez de Ávila, en sencillo pero distinguido festejo el pasado 5, de Febrero, recibieron a familiares y amigos quienes felicitaron a tan distinguida pareja por sus treinta años de vida matrimonial y quienes a la actualidad junto a ellos sus cuatro hijos Raquel Ávila Narváez de 28 años de edad Natzelhi de 22 Jhonattan A. de 15 y Jairo Ulises de 14 todos ellos dieron a sus distinguidos padres los momentos de felicidad como lo han hecho aprovechando los esfuerzos para obtener sus valiosas carreras profesionales.

Juan Ávila, fue quien desde temprana hora se esmerara en preparar los más exquisitos manjares para esperar a sus familiares y amigos a convivir y compartir la felicidad que día con día a coadyuvado con su preciada familia y sus familiares más cercanos que les han permitido llegar a este treinta aniversario de vida matrimonial, los cuales la familia Ávila Narváez, agradecieron la distinguida presencia de los ahí presentes que llenos de jubilo aplaudieron y porrearon al distinguido matrimonio.

Ya posterior a los suculentos platillos, armonía y algarabía Juan Ávila, como símbolo de distinción y reconocimiento a su querida esposa la señora Rosario Narváez, por los treinta años de amor que le ha brindado, además de lo bueno y lo malo que la vida adversa brinda, entrego frente a la concurrencia, las llaves de un precioso automóvil, el cual fue un motivo de jubilo y en donde sus distinguidos hijos llenaron de caricias y besos al señor Ávila, quien termino en el piso, con ello demostrando que lo que venga en el futuro será vencido para obtener mas logros como los ya obtenido a lado de una gran mujer y 4 hijos maravillosos que no dilataran en hacerlo abuelo.