CDD / Observatorio Eclesial
• Jerarquía católica aprovecha su investidura para manipular el voto y obtener privilegios
• Organizaciones civiles presentan documento para informar a la feligresía que por ley los ministros de culto no pueden emprender campañas para orientar el voto
En el marco del proceso electoral, nuevamente la jerarquía de la Iglesia católica, abusando de su investidura, pretende manipular las conciencias de la feligresía para orientar el voto en contra de los candidatos o partidos que no defienden su agenda moral conservadora en temas de sexualidad y de su concepto de “libertad religiosa”.
Si bien la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) y los obispos han llamado a la feligresía a votar en las elecciones, a emitir un voto “razonado” y a no dejarse manipular, en contra sentido en varias diócesis los obispos han publicado cartas pastorales, guías y documentos y han impartido talleres donde proponen votar por candidatos y partidos afines a las enseñanzas de la Iglesia católica, que respeten el derecho a la vida desde el momento de la concepción hasta la muerte natural y que estén a favor de “una verdadera libertad religiosa”.
A través de un monitoreo hemerográfico realizado por Católicas por el Derecho a Decidir sobre la participación de la jerarquía católica en los procesos electorales de 2011 en varios estados de la República y en el proceso electoral del 2012, hemos documentado los reiterados llamados al voto católico:
El año pasado se emprendió la llamada campaña “Voto católico” en la que se instruye a la feligresía por quién votar
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- En algunos estados del país, los obispos han tenido intervenciones directas en la orientación del voto a favor o en contra de partidos políticos. Por ejemplo, en febrero de este año el Obispo de Campeche, Ramón Casto Castro, “llamó a la feligresía católica a ignorar a los candidatos que estén a favor del aborto y los matrimonios entre personas del mismo sexo”. Este llamado irritó a los partidos políticos, cuyos representantes le exigieron mantenerse al margen de los asuntos electorales, y llevaron su queja ante el IFE local para exigir al órgano electoral proceder contra el clérigo, por su “abierta intromisión en el proceso electoral”. No obstante, el prelado Ramón Castro Castro, fue respaldado por el arzobispo de Yucatán, Emilio Carlos Berlié Belaunzarán, quien insistió en que “la Iglesia católica no induce al voto, sólo exhorta a la feligresía a no votar por aquellos candidatos que entre sus propuestas induzcan al aborto o a los matrimonios gay”.
- El obispo de Ciudad Valles, también fue denunciado en noviembre de 2011 por candidatos del PRD, por llamar a no votar por ese partido. Los perredistas de la entidad exigieron al obispo Roberto Octavio Balmori Cinta, no emitir opiniones y mucho menos calificar a los partidos políticos, como lo hizo en días pasados a un diario local, donde afirmó “que no se les ocurriera votar por el PRD y PT porque eran partidos malos”.
- El año pasado se emprendió la llamada campaña “Voto católico” en la que se instruye a la feligresía por quién votar.
- Hace una semana la Arquidiócesis Primada de México repartió el folleto
Principios para iluminar las conciencias de los fieles católicos y personas de buena voluntad en el que señala 11 puntos a los que debe ajustarse el voto católico, entre ellos la oposición al aborto, al matrimonio homosexual, así como el apoyo a la llamada “libertad religiosa”.
Consideramos indispensable que la feligresía conozca las leyes civiles que regulan la participación de los ministros de culto en procesos electorales y no caigan en la manipulación de algunos obispos, sacerdotes y religiosas, que aprovechándose de su autoridad eclesiástica, promueven o desalientan el voto por algún partido político o candidato. Por ello, las organizaciones convocantes damos a conocer la Hoja Informativa Libertad de Conciencia, titulada Las elecciones, un ejemplo de la separación entre las Iglesias y el Estado, en la que se informa que tanto en los documentos oficiales de la Iglesia católica, como en las leyes civiles se establece una estricta prohibición a las Iglesias de intervención en procesos electorales.
Por lo tanto, no podrán hacer campañas por ningún candidato ni partido político: “[…] no podrán asociarse con fines políticos ni realizar proselitismo a favor o en contra de candidato, partido o asociación política alguna […] No podrán celebrarse en los templos reuniones de carácter político”. (Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, Artículo 130 inciso e).
“Tampoco podrán los ministros de culto asociarse con fines políticos ni realizar proselitismo a favor o en contra de candidato, partido o asociación política.” (Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público y su Reglamento, Artículo 14).
Finalmente, hacemos un llamado a la jerarquía de la Iglesia católica a respetar las leyes en materia electoral y religiosa, a reconocer que los candidatos serán elegidos por el voto libre, directo y secreto de la ciudadanía no por las Iglesias, y a respetar la libertad de conciencia de cada integrante de la comunidad de fe en materias de moral y de política.
Exhortamos también al Instituto Federal Electoral a informar a la Secretaría de Gobernación de los casos denunciados en que los ministros de culto, asociaciones religiosas, e Iglesias induzcan al electorado a votar a favor o en contra de algún candidato o partido político, en apego al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales.
No hay partido político católico ni una candidata o candidato católico.
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